Supermercados

Los supermercados tienen patrones de consumo de energía constantes y largos. A pesar de que los horarios de atención a los clientes están definidos durante horas hábiles, los sistemas dentro de sus instalaciones funcionan con horarios extendidos durante toda la noche para mantener las condiciones de los productos perecederos. 

Con estas necesidades cambiantes en el día se identifican oportunidades aplicables para la eficiencia energética como una práctica de ahorro en el uso operativo de la energía sin comprometer la experiencia cliente.